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Cerro Porteño empató 1-1 con Rubio Ñu en la Olla Azulgrana por la cuarta fecha del torneo Clausura 2009 del fútbol paraguayo en un partido sin demasiadas luces. Roberto “Toro” Acuña anotó el tanto del benjamín del campeonato y Roberto Nanni igualó el partido para el campeón del Apertura 2009.

 

Empate a uno signado de buen fútbol, con tendencias cambiantes, un abanico de métodos tácticos aplicados y alta dosis de emotividad. Cerro Porteño y Rubio Ñu hicieron una gran demostración, en donde el principal artículo, el gol, dijo presente sobre el final y de manera consecutiva; terminaron neutralizándose.

El Ciclón volvió a sus raíz táctica (4-4-2) y presentó una amalgama de titulares y suplentes, en donde no calzaron Carlos Báez y Óscar Gamarra. El albiverde argumentó su mejor desempeño en el 4-4-1-1, siendo el gran ausente Carlos Humberto Paredes, en cuyo lugar se lució el capitán Wilfrido Bazán.

Las ocasiones de gol estuvieron proporcionalmente repartidas en la primera etapa, siendo las más concretas el remate al palo del azulgrana Iván González Ferreira y el de Osvaldo Hobecker, uno de los hombres estratégicos de la visita.
 

Cuando Cerro encontró el punto débil del rival, la zona derecha de la defensa, convencional e inteligentemente Francisco Arce hizo algunos cambios posicionales, pasando Bartomeus a solucionar el lado conflictivo. Incluso, ya insinuaba la línea de tres en el fondo, que en el segundo tiempo tomaría forma completa.

El estratega cerrista, Pedro Troglio, sacó a Gamarra y apostó a Jorge Núñez, quien le dio una mejor fisonomía al ataque, en donde el único portador de peligros era Roberto Nanni. Villarreal se pegó a la línea defensiva y los restantes volantes salieron a presionar sistemáticamente. Allí se invirtieron los papeles, pues el albiverde recompuso a sus cuatro defensores e hizo del contragolpe su arma.

El éxodo de futbolistas azulgranas a terreno contrario (salió Mendoza y se armó un 3-1-3-3), más la inclusión del centrodelantero Erwin Ávalos (quien jugó su primer partido del año), proporcionó mayor espacio a Rubio Ñu. Ya en los minutos postreros, Roberto Acuña, tras pase de Francisco García, con categoría perforó el arco de Cerro; parecía el punto final. Pero el nuevo artillero, Roberto Nanni, en el último suspiro le puso cierta justicia al marcador. Rubio Ñu perdió la vanguardia, aunque camina firme entre los grandes; al Ciclón se le pierde la brújula del Clausura, en donde aún no conoce de victorias y no encuentra “La Paz” que buscará en la revancha copera, el jueves.

 

“Merecimos más que el empate”
- PEDRO TROGLIO, DT DE CERRO

“Sinceramente merecimos más que el empate, que al final quedó corto por todo lo que hicimos nosotros. Rubio Ñu marcó el gol en la única jugada que creó en la segunda etapa. Tuvimos tres a cuatro situaciones concretas que no aprovechamos y veníamos haciendo bien las cosas en el segundo tiempo”, expresó el entrenador de Cerro, Pedro Troglio. “La defensa no me preocupa, el gol fue de media distancia y el arquero Medrán no pudo hacer nada. Ahora vamos a pensar en la Copa Sudamericana, en donde debemos clasificar”.


Formaciones

Cerro Porteño: Ezequiel Medrán; Iván Piris, Carlos Báez, Diego Herner y David Mendoza; Oscar Gamarra, Javier Villarreal, Jorge Brítez y Celso Ortiz; Iván González Ferreira y Roberto Nanni. DT: Pedro Troglio.

Rubio Ñu: Anthony Silva; Wilfrido Bazán, Oscar Ayala, Fredy Vera y Tomás Bartomeus; Osvaldo Hobecker, Roberto Acuña, Carlos Humberto Paredes y Diego Chamorro; Luis Closa y Pablo Velázquez. DT: Francisco Arce.

Arbitro: Carlos Torres.

Asistentes: Milciades Saldivar y Tiburcio Gauto.

Cuarto árbitro: Julio Quintana Rodríguez.

 

Y volvió nomás

Erwin Lorenzo Ávalos, retornó oficialmente a jugar luego de doscientos setenta y tres días. Lo hizo ingresando en el segundo tiempo del juego ante Rubio Ñu.

El delantero-goleador había sufrido una delicada lesión en el juego ante Nacional por el torneo Apertura del 2008. Ávalos con su fogosidad y entrega que lo caracteriza, disputó un balón en el área de los tricolores, esa vez con mala fortuna, que al arrojarse al césped para disparar el balón al arco, accidentalmente Raúl Piris, cayó sobre su rodilla derecha.

 

Los estudios arrojaron como resultado, rotura de ligamento cruzado. Fue rápidamente sometido a una cirugía y luego se vino el largo proceso de recuperación.

Retornó Erwin y fue ovacionado en el momento que ingresaba, la hinchada azulgrana, le demostró su admiración y le brindó su apoyó, con el Ole Ole Ole Erwin Erwin. En la cancha el futbolista puso lo de siempre, mucha movilidad, entrega, inteligente para moverse sin balón y no cabe duda que su recuperación, representa un aporte importante, para el Ciclón que tiene dos competencias paralelas.

 

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